Ayer fue mi último día de viaje de egreso. El viaje se dividió en varias etapas:
1: Dormir. Nos habíamos quedado despiertos hasta las cinco/seis de la mañana después de un día de corridas (desde las ocho) y habíamos salido a las nueve, así que por poco no nos desnucamos cuando llegamos al micro. Obviamente, no hay mucho que contar, salvo que en un momento quise ir al baño y no pude porque un profesor estaba tirado en el pasillo durmiendo.
2: Comer. Tampoco mucho para contar. Milanesa con papas fritas. Con una amiga estábamos hablando de un chico que se mandó la hijeputez de su vida y de repente nos dimos cuenta de que estaba justo atrás nuestro. Nos agarró tal ataque de risa nerviosa que todos nos miraron.
3: Canciones de cancha. Agarramos un bombo, silbatos y nos pusimos a cantar lo que se nos venía a la cabeza, desde "Una gitana hermosa tiró la carta, dijo que [inserte equipo propio aquí, tres o cuatro sílabas] iba a ser campeón, ya lo' corrimo' a [inserte equipo enemigo aquí, dos sílabas] y no pasó nada, y ahora lo corremo' a [inserte a otro equipo enemigo aquí, dos sílabas] que es un cagón... dale, dale, [inserte equipo propio aquí, una sílaba]", hasta "Que nos saquen a patadas, no no' vamo' nada" (reemplazar los ' por eses). Ah, nos sacamos los ojos entre nosotros con las banderas de nuestro equipo (en el que juegan los chicos). El mejor momento del viaje, nos re cagamos de risa.
4: Película, la peor que vi jamás. 1408, de terror. MUY MALA. Casi se me muere un chico al lado que se atoró con su propia saliva mientras dormía (exagero, pero en el momento me asusté bastante).
5: Y sí... llegó la parte emotiva. Abrazos, llantos, "te quiero", "nunca te voy a olvidar", "nos vamos a seguir viendo"... en ese momento no lloré, aunque consolé lloronas.
Cuando llegamos, también estaba "seca". Sin embargo, ni bien puse un pie afuera del micro... me di cuenta de lo que realmente significaba perder a los amigos que me acompañaron estos siete (más, en realidad) años de mi vida, más de la mitad, que son lo mejor que tengo y total y completamente irremplazables. Según palabras de mis amigas, era "una canilla".
Juro por mi vida que todo lo que dije en ese momento me salió de adentro... es la más pura y completa verdad. Todos los "te quiero", "te amo", "nunca te voy a olvidar", "sos mucho", "te voy a extrañar", "me vas a hacer falta"... absolutamente todos. Al abrazar a mi mejor amiga, me costó un triunfó soltarla sabiendo que ya no nos veríamos todos los días, que ya no seríamos tan cómplices, al no saber yo de quiénes me estaba hablando en sus chismes, al no saber el ambiente de su futura secundaria. Sí, nos vamos a seguir viendo, pero... no es lo mismo. Digan lo que digan, no es lo mismo. Nadie se acuerda de sus compañeros de primaria, a menos que también sean de secundaria o que vivan muy cerca. Y yo no quiero terminar así.
En la colación de grados (emm... estoy yendo de atrás para adelante, pero no importa) fue algo parecido. Sólo que cuando la maestra empezó con el discurso de "¿Se dan cuenta, realmente, de lo que significa este acto?", en los primeros cinco minutos, con la música de "Amigos" de fondo yo empecé a llorar y no paré hasta que, una hora y media después, llegamos a la pizzería donde fuimos todos a festejar.
La fiesta... la verdad, no hay mucho que contar. No hubo momentos emotivos/cursis, simplemente baile, baile, y baile...
Mmm... bueno, creo que llegó el momento de pasar a otro tema más alegre, ¿no?
Mis notas en los parciales del curso de ingreso fueron mejores de lo que esperaba. Mis profesores dicen que tengo muchas posibilidades de quedar entre los primeros, aunque eso no cambie mucho. Sólo va a alimentar mi ego, que ya de por sí está bastante grande.
¿Mai? Bien, callada. Ella sabe que cuando estoy así lo mejor es dejarme descargar, enroscarme, llorar, reír, y se me va a pasar solo.
Exaaaacto. Se arregla bien sola, si meto pata en estas situaciones es peor. Conversamos, por supuesto, pero sobre temas banales, si es que se pueden llamar "temas" a esos adefesios.
En cuanto a las formas... últimamente estamos bastante copadas con el gato selvático y no usamos mucho la de gato pescador, pero sigue siendo esta última nuestra favorita. Más que esto mucho no hay.
Y bueno... se nos acabaron los temas. Las ganas también.
PD: por cierto, feliz navidad =P
¡Chaaaan, edición de último momento! Me re olvidé de poner esto, con lo necesario que es... letra y video de Amigos, de los Enanitos Verdes. Está tan quemada esta canción en los egresos... pero es que es simplemente perfecta, lo describe todo en unas pocas estrofas...
No importa el lugar